Ayer era Martes
Y esa es la conclusión más lógica de que hoy sea miércoles.
Los martes en mi casa pasan dos cosas: que yo veo house y que mi padre sale a tomar unas cervezas con unos amigos.Esta segunda costumbre empezó hace relativamente poco, cuando un pariente lejano mío por parte de mi padre (nunca se me dieron bien los nombres de las relaciones de parentesco, asi que siempre le llamé mi tío, aunque realmente no lo era) por circunstancias de la vida, se mudó a Carril, y la cercanía y el aburrimiento hicieron el resto. A ellos luego se sumaban a veces otros amigos, así que eran un grupo normal de 4-5 personas tomando cervezas.
Mi tío murió poco antes de Navidad.
La puñetera casualidad hizo que mi tío se pareciera físicamente un montón al solitario.
El resto de la puñetera casualidad, y es lo que de verdad no entiendo en este mundo, es que en sus últimos momentos estuviese solo.No voy a decir que era un santo (y si alguien lo fuera, igual tampoco era el), pero nadie se merece que le abandonen y, lo que es peor, le acusen y le ataquen cuando no se puede defender. Las únicas personas que le iban a visitar al hospital era el grupo de irse a tomar las cervezas. Ni su exmujer, ni sus hijos, ni su familia cercana. Y aún lo intentaban llevar a juicio. Y ponían a los hijos en su contra, manipulándolos. Y asuntos de dinero. Sin tregua.
Lo que intento decir es que no me parece triste que mi tío muriera, sino que la gente pueda hacer esas cosas. Me parece triste que un hombre que conocía a gente en todo el mundo muera con las personas con las que se tomaba las cervezas los martes.
Ayer era martes, y mi padre invitó a cenar a casa a un par de esas personas del grupo. Una de ellas apenas conocía a mi tío, apenas de unos meses, y sin embargo estuvo en el hospital, animándolo y acompañándolo.
Esto no tiene moraleja, sólo quería sacarlo de dentro. Porque pasan los años, y se supone que se aprenden cosas, pero yo hay muchas cosas que aún no entiendo.
PS: No suelo mencionar de donde saco las imágenes del Google, pero tengo que pedirle perdón a Alejandro Ramos Diaz por robarle la imagen del principio, que tituló El Solitario.
Prometo volver a escribir en breve, pero procuraré que sea algo más alegre ;)